-
Venerable – dijo un día el joven mientras caminaban al atardecer por el sendero
- ¿Qué es lo que el iluminado sabe, que tal vez nosotros ignoramos?¿Qué nos
diferencia de él?...
-
Verás – dijo el anciano – nosotros creemos firmemente en la unidad esencial de
todas las cosas, más allá de las apariencias, ¿verdad?, creemos firmemente que
Todo es Uno, ¿no es así, amigo mío?...
-
Asi es, Venerable – respondió el joven…
-
Pues bien, él no lo cree…
El
joven miró con ojos sorprendidos al anciano, que se inclinó hacia él y habló en
tono confidencial, sonriendo amablemente…
-
Él lo sabe…
Anónimo